La elección de un toldo depende del espacio disponible y las necesidades específicas de la vivienda o negocio. Un toldo puede instalarse en ventanas, terrazas o escaparates. Para adaptarse a las medidas de cada espacio se podrán elegir distintas formas y materiales.
Tipos de toldos
Si nos centramos en su estructura podemos distinguir varios tipos. Los más frecuentes son:
- Toldos con cofre
- Con semicofre
- Sin cofre
Los toldos sin cofre, se enrollan sobre sí mismos quedando la estructura y la lona a la intemperie. Con ellos el toldo está más expuesto a las inclemencias del tiempo y por tanto su vida útil se puede ver mermada. La opción de toldos con semicofre se basa en que la estructura del toldo protege por completo la tela al recogerse dejando fuera tan solo el faldón y los brazos del mismo. Por su parte los toldos con cofre protegen por completo la lona y la estructura cuando estos se encuentran enrollados. Con esta opción la protección de la tela y estructura es máxima ya que permite protegerlos del polvo, la lluvia o la contaminación.
Tipo de tela
La elección de la tela es otro punto a tener en cuenta. La naturaleza de la tela debe adaptarse a las necesidades de la instalación. Existen telas de distintas clases para cubrir distintas necesidades. Los más comunes son los tejidos fabricados con tela acrílica capaz de filtrar el 80% de los rayos UV y que es muy resistente a la humedad y el viento.
Las telas de poliester protegen del sol, pero al ser un material menos resistente su duración es más limitada. Por último los tejidos microperforados ofrecen una protección mayor frente a los rayos solares. Son capaces de retener hasta el 94% de estos rayos y permiten la ventilación para controlar la temperatura.
En Moñita disponemos de toldos de todo tipo fabricados con las mejores calidades.