Los toldos son de lo más útil en las distintas épocas del año, tanto para evitar un buen chapuzón en invierno como para pasar un agradable día de verano y no asarnos de calor.
Pero como todo, necesita un mantenimiento para evitar que el toldo se deteriore antes de tiempo. Una de las causas más corrientes por las que se estropean los toldos es el óxido y es aquí, donde nosotros os echamos una mano.Os aconsejaremos 3 maneras de quitar el óxido de vuestros toldos, elegid la que más os guste.
Utilizando vinagre blanco sobre las partes en las que se encuentre el óxido y frotándolas con un estropajo podréis quitarlo del metal. Otro método será arrojando sal por toda la superficie oxidada y derramando el jugo de la lima durante unas pocas horas podréis hacer desaparecer el óxido si posteriormente lo frotáis con la cáscara de la lima. El último procedimiento, será hacer una pasta de bicarbonato de soda mezclándola con agua y esperando a que esté espesa, después aplícala en la zona oxidada y esta hará una reacción que al tiempo permitirá disolver el óxido.