En Moñita tenemos una amplia diversidad de productos que ofrecer a nuestros clientes. Pero la mayor tranquilidad a la hora de referirnos a ellos es la tranquilidad de saber que ofrecemos un servicio de la máxima calidad. No solo por los productos ofrecidos (que gozan de las mejores tecnologías del mercado) sino también por el trato proporcionado. El hecho de poder trabajar con nuestros clientes durante todo el tiempo que dura el proceso es lo que nos confiere posibilidades de ser diferentes. Es por ello que queremos ser capaces tanto de ofrecer un producto de calidad sobre el papel como de transformarlo en real.
Por ello, nos involucramos en el proceso desde el principio del mismo hasta que se instala todo. Desde el principio porque nuestros potenciales clientes nos transmiten sus necesidades y nosotros las transformamos en un proyecto que se transmite, ese mismo proyecto es llevado a cabo de manera PERSONAL, es decir, ninguna instalación es igual a otra anterior y todo es tan personal que todo lo que el cliente requiere lo hacemos nuestro. La tranquilidad del servicio correcto también radica en que el cliente puede optar por no ocuparse de nada y que los profesionales de Moñita realicen el proceso completo.
Toda esta tranquilidad está ratificada por nuestras Certificaciones y Homologaciones, que nos convierten en una referencia en el mercado y con todas las garantías de un proceso correctamente realizado. Por eso no nos gusta que todo finalice tras la instalación sino que el servicio post-venta se realice mediante un seguimiento del mismo y que en cualquier posible problema que pudiera surgir con el cliente, nosotros pudiésemos ayudar a solucionarlo. Este tipo de servicio es el que nos gusta dar a nuestros clientes porque es el que nos gustaría que nos dieran a nosotros, seguridad 100%.